Eutanasia: ese fracaso social.

Un paso más en la cultura de la muerte. Disfrazado de compasión, este suicidio asistido supone otro paso
para eliminar a todo lo que no sea productivo para la sociedad. ¿Hasta donde llegará el vacío moral? Seguimos ahondando en nuestro fracaso como sociedad.

La única muerte digna es aquella en la que la persona no se denigra huyendo del dolor físico o mental. Lo digno es afrontar los problemas e intentar vencerlos. La rendición es cobardía, fracaso; la aceptación es valentía y generosidad.

Esto -desde el punto de vista cristiano- es duro, pero ofrece la oportunidad de prepararse para la muerte y obtener “réditos” ofreciendo la lucha para desagraviar.

¿Eutanasia o muerte digna?

Está “de moda” el debate sobre la eutanasia. En el afán del hombre por controlarlo todo empiezan a surgir “derechos” que nunca fueron tales, pero que la post-verdad presenta como normales aun cuando vayan contra la naturaleza humana (derecho al aborto, derecho a morir “dignamente”, a elegir nuestro “género”…)

Últimamente, el debate se centra en la potestad del hombre para decidir su momento de muerte. Como el suicidio, pero encubierto por la manipulación del lenguaje.

¿Eutanasia u Ortotanasia?

La eutanasia es la acción de provocar la muerte de una persona cuya enfermedad es incurable en esos momentos. La ortotanasia es permitir que la muerte ocurra de forma natural, sin emplear métodos extraordinarios y desproporcionados para mantener una vida llamada a extinguirse.

La muerte puede producirse por acción (realizando acciones que desembocan irremediablemente en la muerte, para evitar los dolores y sufrimientos que puede acarrear enfrentar la enfermedad) o por omisión (renunciando a intervenir en el proceso de la muerte, abandonando tratamientos)

La diferencia entre la eutanasia y la ortotanasia (“muerte digna”) es que la primera hace que la persona muera, con o sin su consentimiento, y la segunda es permitir que muera en su «tiempo cierto» (retirando el soporte artificial que la mantiene con vida), con su consentimiento o el de su familia si el enfermo no puede decidir.

Una decisión economicista

Me pregunto si la intención de legalizar la eutanasia de la mayoría de los partidos políticos españoles actuales, está basada en razones humanitarias o en razones puramente económicas. La tentación por rebajar el coste que supone para las arcas públicas mantener enfermos terminales, enfrentando enfermedades con largos y costosos tratamientos, es demasiado fuerte en esta sociedad de consumo, incrédula, pragmática y endiosada…en la que muchos renuncian a la lucha y tiran la toalla ante la falta de Esperanza.

Porque en esta sociedad materialista en la que se lucha por enterrar todo rastro de Trascedencia, la Esperanza es cada vez menor. El hombre por el hombre, esa es la consigna…y en este caso, el suicidio se  disfraza de compasión.

A este respecto os dejo un extracto de un testimonio que aparece en las reflexiones para cada día de José Pedro Manglano. Cuando leí esto me di cuenta que la vida no son solo nuestras sensaciones, sino que se llena con las sensaciones que provocamos en los demás.

“El otro día sostuve a una enferma de alzhéimer entre los brazos mientras la bañaban. Su escueto cuerpo casi se resbalaba en la bañera y vi a su esposo llorar por temor a perderla (…) ¿Y saben qué pensé? Pensé que su muerte sería un alivio, que me parecía un desatino la mente completamente perdida y el cuerpo desmadejado de mi amiga, un contradios.

Al día siguiente, en un golpe de lucidez, repasé estos pensamientos de la víspera. Y decidí pararme un momento a examinar por qué una cristiana practicante, bendecida por la vida y las circunstancias económicas, familiares y sociales, podía desearle la muerte a otra persona (…) Recordé su alegría con los colores del camisón. Ella no sufría, era feliz en su simpleza. Le recordé también a él, contento con la escena, satisfecho por conservarla a su lado, por ayudarla día a día, por mi amistad. Y caí en la cuenta de que en aquella escena solo yo puse muerte. Y no lo hice por el bien de la enferma, que disfrutaba; no lo hice por su familia, que la quiere, lo hice simple y llanamente por cobardía. Porque sufrí viéndola y no quería seguir sufriendo (…) La mentalidad dominante está al acecho para colarse en nuestra mente a la menor oportunidad. Para sembrarnos de duda y de miedo la cabeza e impedirnos ver la belleza, el bien, la positividad. Pido perdón por haber vacilado, por haber censurado la hermosura. Por haber creído en el mal.

Y concluyo:  si yo, que apenas veo la tele; que leo a los clásicos porque mi padre me enseñó; si soy católica porque la Iglesia me ha abrazado; que lo tengo todo, albergo alguna vez pensamientos de muerte ¿Cómo no los va a albergar el resto de mis contemporáneos, sometidos a un constante bombardeo de mentiras? ¿cómo no los van a albergar ciertos enfermos desalentados, tantas personas ideologizadas sin saberlo, tantas víctimas de la mentira? (…) Queda mucha hermosura por mostrar en un mundo tan débil y tan lleno de tristeza como estamos creando”

Impactante, nos lleva al núcleo de la cuestión: Falta Vida Interior.

Cuidados paliativos

Son cuidados paliativos los que se ofrecen al paciente para que tenga una mayor calidad de vida, dentro de los efectos de la enfermedad. Van desde la mitigación del dolor a luchar contra la depresión, pasando por solventar problemas prácticos (acceso a vivienda, asesoramiento sucesorio…) u ofrecer ayuda espiritual.

Aceptados por la Iglesia -incluido el abandono de tratamientos-  siempre que no supongan provocar la muerte, sino aceptar situaciones en la que no nos es posible impedirla.

Una frontera difusa

Es muy complicado distinguir cuando es moralmente aceptable abandonar un tratamiento y dejar morir a una persona. Para un cristiano, esto pasa por tener un asesoramiento espiritual con alguien que conozca la trazabilidad de la enfermedad, y tenga suficiente formación para poder discernir en estos complicados casos.

Desde luego es más fácil cuando las personas afectadas (pacientes, familiares, prescriptores, consejeros…) tienen claros los criterios de Esperanza y Trascendencia.

A partir de aquí, “más sabe el loco en su casa que el cuerdo en la ajena”…pero debemos tener cuidado, porque este tema es otro de los que componen el “cambio silencioso” en el que España está sumida desde la transición.

¿Radical o racional?

En el momento en que la derecha obvió la cultura y la ideología, y se dedicó en cuerpo y alma al más crudo capitalismo, la izquierda conquistó el campo de las ideas. Desde ahí está dando la batalla. Es hora de recuperar pasión, épica, principios…y de superar el pragmatismo económico y la corrección política… guiados por la razón!! Seamos inactuales!!

Según la RAE, radical quiere decir  fundamental o esencial; total o completo; partidario de reformas extremas; extremoso, tajante, intransigente; perteneciente o relativo a la raíz.

A menudo las palabras tienen tantas acepciones que dependerá del contexto en que la utilicemos para que se llenen de sentido. Continuar leyendo «¿Radical o racional?»

«La Revolución no necesita peluqueros»

¿Conoces la diferencia entre homosexual y homosexualista? El movimiento homosexualista utiliza a los homosexuales para sus fines políticos. Una silenciosa amenaza se cierne sobre la sociedad, en general, y los homosexuales en particular. Como dijo Fidel Castro, «la revolución no necesita peluqueros».

Una vez que el proletariado ha conseguido un buen nivel de vida con el sistema capitalista, certificando la muerte del comunismo, la izquierda ha buscado nuevos objetivos para no desaparecer. En un alarde de manipulación y falta de respeto hacia todas esas personas que, prudentemente, padecen la homosexualidad en silencio, ha hecho del colectivo homosexual una de sus marionetas de feria para transformar la sociedad y orientarla hacia sus intereses. Nace el homosexualismo. Continuar leyendo ««La Revolución no necesita peluqueros»»

2 años reflexionando

Tras varios años de evolución de mi anterior pensamiento demócratacristiano hacia pensamiento socialcristiano, me parece que la búsqueda y priorización de los puntos de covergencia entre ambos pensamientos es el mejor camino para derrotar el marxismo cultural. Y el adjetivo «cristiano» es común a ambas denominaciones. Blanco y en botella. De eso va este blog.

La actualidad tienen una enorme influencia sobre nuestra forma de vivir y sobre la sociedad que dejaremos a nuestros hijos. Si queremos decidir y no que otros decidan por nosotros, tenemos que conocer, analizar y crearnos una opinión sobre las distintas realidades sociales. Y tener presente que hoy se le llama bien al mal y mal al bien. Continuar leyendo «2 años reflexionando»

Donde dije «digo»…¡coherencia!

Que difícil es alinear nuestros principios y valores con nuestra forma de vida. ¿Cómo superar la incoherencia que nos azota?,¿qué puedo hacer en mi día a día?

Intentar ser coherente es intentar que nuestros pensamientos no se contradigan con lo que decimos, ni con lo que hacemos. Utilizo “intentar” porque traerá dificultades a nuestras vidas y nos pedirá caminar contracorriente. No siempre lo conseguiremos, debido a nuestra debilidad humana, pereza o miedo. Decir lo que pensamos y hacer lo que decimos, atendiendo a la oportunidad, definirá  nuestro grado de coherencia. Continuar leyendo «Donde dije «digo»…¡coherencia!»

Cura soltero, cura casado.

¿Sabías que hay sacerdotes católicos casados?. ¿Sabes por qué muchos no contraen matrimonio?. En este artículo se intenta explicar de forma breve.

En la implacable e incesante persecución a la Iglesia Católica en España, una de las armas favoritas, es poner en duda que el celibato sacerdotal sea el estado más adecuado para que los Ministros de Dios desarrollen su misión. Continuar leyendo «Cura soltero, cura casado.»

10 puntos que definen nuestro grado de feminismo

Descubre en qué grado eres feminista. España es uno de los países donde más igualada está la relación derechos-obligaciones entre ambos sexos. Y lo tenemos interiorizado. Claro que la sombra del Nuevo Orden Mundial es alargada…

A veces, a la hora de posicionarnos sobre algunos temas, nos dejamos llevar por la marea imperante en nuestro entorno, sin plantearnos qué sostenemos en realidad. Continuar leyendo «10 puntos que definen nuestro grado de feminismo»

Del feminismo al hembrismo en 4 etapas.

Nada queda ya del concepto que definía un feminismo de nobles reivindicaciones. Hoy, la ultraizquierda se ha adueñado del término y lo ha transformado hasta adaptarlo a las pretensiones transformadoras del nuevo orden.

La palabra feminismo no es unívoca. Desde el inicio del feminismo en el siglo XV hasta la actualidad, esta palabra ha sido víctima de la perversión del lenguaje. Nada tiene que ver el concepto de la palabra cuando hacía referencia al feminismo liberal y sufragista  que todos compartimos, con el de hoy, cuyo concepto quieren apropiarse las izquierdas y el movimiento “queer”. Continuar leyendo «Del feminismo al hembrismo en 4 etapas.»

Abortando el aborto

Diciembre, mes de la Sublime Maternidad, de los Santos Inocentes y del Nacimiento. Momento propicio para, basándome en enlaces como Catholic Link, o cuentas twitter como Embrión Humano, La Vida lo Primero, Ciencia y Fe… tratar el tema del aborto e intentar dar argumentos claros para demostrar su error y reavivar una llama opositora que languidece cada vez más.

Cada día es más normal encontrar en nuestro círculo personas que confunden, minusvaloran e incluso legitiman el aborto. La aceptación social de este genocidio nos ha vuelto insensibles y nos lleva a restarle importancia. ¿ Condescendencia con uno de los mayores errores de la historia de la humanidad? Hay que superar el «efecto invisibilidad», razón por la que no nos afecta lo que no vemos. Continuar leyendo «Abortando el aborto»

El valor de tener criterio

¿Qué modelo de sociedad queremos? ¿Sabemos qué pretendemos en Educación, Sanidad, Defensa…? ¿Vamos por delante y proponemos o nos adherimos a propuestas ajenas aunque no se ajusten a nuestras demandas? ¿Tenemos criterio?

El capital social de una comunidad se mide por su nivel intelectual. Así, las sociedades más avanzadas son aquellas en las que sus integrantes están más formados, leen más, se preocupan por estar al tanto de la actualidad, dedican tiempo a proveerse de argumentos válidos para sostener opiniones, definen sus criterios, renuncian a mantras y argumentos prefabricados. Continuar leyendo «El valor de tener criterio»