Si Julio Romero de Torres hubiera sido contemporáneo, seguro que no habría dejado escapar la oportunidad de pintarla. Porque no muchas damas pueden presumir de una fisonomía tan española, tan andaluza. Y ese moreno intenso, preludio de una actitud pujante y combativa, es el santo y seña de una señora por la que siento una profunda admiración. Continuar leyendo «A sus pies, Señora!!»